La herramienta estadística de JUNAEB, que permite dimensionar la situación nutricional de los estudiantes de todo el territorio nacional, reveló un aumento del 1,8% del grupo de escolares con un estado nutricional normal. Sin embargo, los índices de malnutrición por exceso aún siguen altos.
Nota original en www.inta.cl (14/05/2024).
Recientemente se presentaron los resultados del Mapa Nutricional 2023, en donde se observó una disminución en términos de malnutrición por exceso (obesidad y sobrepeso) en todos los cursos evaluados (preescolares, 1° y 5° básico, y 1° medio), y, en mayor medida, en los cursos de 1º y 5º básico. “A pesar de esta reducción, los valores que registra Chile en sobrepeso y obesidad siguen siendo preocupantes. En general, se estima que los datos son más favorables que la tendencia de los últimos años (tanto en pre cómo post pandemia), dado que, por lo menos, la malnutrición por exceso se estaría estabilizando”, dice la profesora Camila Corvalán, Directora del Centro de Investigación en Ambientes Alimentarios y Prevención de Enfermedades Crónicas Asociadas a la Nutrición, CIAPEC del INTA de la Universidad de Chile.
“Aunque existe esta reducción respecto a la tabulación de datos del año anterior, en números reales 3 de cada 5 estudiantes presentan sobrepeso, obesidad y obesidad severa”, observó Francisco Pérez, director del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos, INTA de la Universidad de Chile, quien estuvo presente en la entrega de los resultados por parte Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (JUNAEB) del Ministerio de Educación.
“El hecho de que las tendencias se mantengan, o incluso disminuyan un poco, son muy buenas noticias. Los reportes y las metas que hoy existen en relación con la obesidad infantil muestran una disminución del alza y, en los casos más optimistas, no hay aumento”, así lo explica la profesora Camila Corvalán.
Inequidades y espacios vulnerables reflejados en la nutrición
Entre los espacios más vulnerables, como es el caso de zonas rurales y niveles socioeconómicos bajos, el Mapa muestra con claridad una mayor prevalencia de obesidad y sobrepeso. Aquí la población migrante, destaca al tener un mayor porcentaje de estado nutricional normal, pero aun así coexiste con un porcentaje no despreciable de malnutrición por déficit (10,7%).
“Son muy relevante las inequidades en la distribución de los problemas nutricionales que se están concentrando en zonas rurales y en grupos indígenas”, comenta Corvalán, quien afirma que estos grupos concentran mayor desventaja, siendo urgente recalcar que cualquiera de las medidas que se apliquen “tengan un foco de equidad con una evaluación de si efectivamente lo que estamos haciendo le está llegando a quienes más lo necesitan”.
Lo que falta para enfrentar la obesidad infantil
“Por supuesto que en términos de prevalencia de la obesidad la situación sigue siendo crítica. Es necesario tener presente que las cifras de obesidad infantil en Chile, son de las más altas del mundo. Si bien el Mapa muestra un estancamiento, es fundamental seguir implementando medidas y acciones a largo plazo para poder revertir las cifras del 2023”, afirma Nelly Bustos, académica y Directora de Extensión y Comunicaciones del INTA, quien además indica que “es muy prematuro afirmar estas cifras se mantendrán. Si la tendencia es real, se debe ir confirmando con las mediciones de los próximos años”.
El Mapa Nutricional es una herramienta de medición que se aplica desde 1987 “y ha mostrado un aumento permanente de la obesidad: desde un 7,5 por ciento en primero básico, hasta los valores actuales de 25 por ciento”, comentó el Profesor Fernando Vio del INTA en una carta al Director en La Tercera recalcando, además, que este aumento en realidad no se ha estancado, a pesar de los esfuerzos en implementar diversos programas de salud para intervenir la población. Aquello debido a que estos siempre han durado el periodo correspondiente a un gobierno, sin tener el impacto necesario por no ser una “política de Estado continua, intersectorial, con financiamiento y evaluación permanente”.
INTA y su frente a la realidad epidemiológica
Mediante la investigación, la participación en la implementación de políticas públicas, y la elaboración de programas de salud que permitan resultados positivos a largo plazo, el INTA se ha comprometido a afrontar los desafíos de esta realidad epidemiológica. Un ejemplo de ello son los estudios que realiza el CIAPEC, en donde normativas basadas en estos, como la Ley del Etiquetado, buscan que niños y niñas toman decisiones conscientes en torno a su alimentación. En esta línea también están los trabajos realizados en zonas rurales, como es el desarrollo de una nueva metodología que apunta a la implementación y reformulación de programas y políticas de alimentación escolar a través de la herramienta Escuelas Sostenibles, iniciada en el Liceo Bicentenario Insular de Achao en Chiloé. Al mismo tiempo, para entender el valor global y territorial de los factores de riesgo asociados a obesidad infantil, el Instituto ha estado trabajando durante los últimos años en IROBIC (Índice de Riesgo de Obesidad Infantil Comunal) para determinar áreas prioritarias a intervenir en favor de una alimentación saludable de comunidades específicas.